Tras la máscara de Fire se encontraba nuestro viejo conocido Vicente Cervantes. Con el rostro sudoroso y la frustración en los ojos, dio sus puntos de vista sobre la derrota que le costó perder la tapa.
«Seguiré adelante con mi carrera, porque esta rivalidad con Último Dragoncito no termina aquí. Le tengo que echar más ganas porque me ganó la máscara, pero aún queda mi cabellera y buscaré una nueva oportunidad para sacarme la espina, no quedé contento, perdí y lo reconozco, pero de ahí a quedar conforme hay un abismo.
«Llevó 17 años en la arena México, me inicié como Mascarita Mágica, estuve como técnico y creo que demostré que estoy a buen nivel como rudo, pero lo mío es la rudeza porque los científicos son muy chillones y yo soy gente de pelea, de batalla. Como Mascarita Mágica perdí la máscara contra Espectrito de Ultratumba, en la arena Coliseo; duré siete años con ese nombre. Mis maestros fueron El Chacal de la Rosa, posteriormente Potro Salvaje y El Hijo del Gladiador.
«Mis inicios fueron en la arena Popo y en el Comité 39, luché como Bumerang y luego como Fantasmagórico, luego fui Mascarita Mágica y tras unos años me presenté como Fire, con este nombre llevo 8 años. Me siento bien, entero. Un saludo a todos los lectores y personal de esta revista».