Hijo de Pirata Morgan se ha quedado en Triple A para cuidarle las espaldas a su padre. Aunque contento por su decisión, no oculta cierto pesar por la salida de sus hermanos de la empresa:
«Extrañaré mucho a mis hermanos, pues teníamos bastantes años luchando juntos (un año como independientes, y 2 años en Triple A).
Sobre el ring y en los viajes nos divertíamos como nadie. Entre nosotros, la coordinación era perfecta por todas las horas que practicábamos en el gimnasio. No necesitábamos vernos para saber cuál era la estrategia. Apoyo su decisión de buscar nuevos horizontes, pero yo me quedo en Triple A, donde deseo alcanzar muchas metas. Ahora me toca demostrar que solo puedo con quien sea.
«Tengo 16 años de edad (estoy por cumplir los 17), y como luchador profesional llevo 3. Sé que tengo mucho camino por recorrer, y me sigo preparando para estar a la altura del nombre que llevo. Ahorita, mi primer objetivo, es adaptarme a los compañeros que me pongan.
También deseo ayudar a mi padre a acabar con los bailarines que denigran la lucha libre. No me gusta que le falten al respeto a esta actividad que llevo en la sangre.
«Anhelo ser estrella en Triple A, y para eso no hay otra que trabajar duro. Bases no me faltan, y soy un tipo que cumple lo que se propone. A la afición le mando un saludo, y les deseo que les vaya como se porten».