¡Grond XXX, entre la vida y la muerte!

El domingo pasado, Grond XXX fue operado de emergencia y desde ese día permanece en el hospital. Le diagnosticaron pancreatitis aguda y el médico que lo atiende le dijo que, de diez personas que sufren esa enfermedad, sólo dos logran sobrevivir.

Cuando BOX Y LUCHA subió a la habitación donde permanece este gladiador –en la clínica Santa María, ubicada en la avenida Chimalhuacán, de Nezahualcóyotl- Grond XXX yacía despierto en la cama, con una sonda gruesa enterrada en una de las fosas nasales, misma que le fue colocada para impedir que cualquier líquido llegue a su estómago. Pese a la gravedad de su caso, y a que tiene una herida enorme en el abdomen, tuvo fuerzas para hablarnos de la tragedia:

«Todo empezó el domingo pasado. Yo estaba dormido en mi casa y cerca de la media noche desperté porque tenía muchísima hambre. Comí y vomité todo. Después tomé un licuado de proteínas, volví a vomitar y me dio un dolor terrible en el estómago. Estaba revolcándome en el piso cuando llamé por teléfono a mi ex esposa, Esther Moreno, y le pedí que me llevara unas pastillas. Ella me escuchó tan mal que pidió una ambulancia y fue a verme inmediatamente. En la clínica, los médicos me hicieron ultrasonidos y varios análisis, pero nada de eso fue suficiente para que pudieran dar un diagnóstico. Entonces, el doctor me dijo que tenían que operarme lo antes posible porque el dolor que yo traía era terrible, y si transcurrían cuatro horas sin que pudieran controlarlo, yo entraría en estado de coma y sólo resistiría 24 horas antes de perder la vida.»

En el quirófano, a Grond XXX le hicieron una herida enorme en el estómago. Le revisaron órgano por órgano para encontrar la causa de su mal. Los cirujanos hallaron cálculos en un riñón que está severamente dañado y, además, encontraron el páncreas a punto de estallar: «No he comido ni bebido nada desde el domingo porque puedo morir si como cualquier cosa o si tomo un vaso con agua.»

Grond XXX podría pasar tres meses en el hospital, alimentado sólo con suero intravenoso: «El doctor dice que estoy segregando en exceso un líquido de cuyo nombre no me acuerdo. Los niveles normales de esa sustancia deben estar entre 150 y 300. Yo tengo 3 mil, y debo seguir en el hospital hasta que me estabilice. Pronto me van a hacer unos exámenes nuevos y de eso dependerá si me dan de alta esta misma semana o si me quedo tres meses aquí, sobreviviendo con sondas y suero.

«Esto es lo peor que me ha pasado. En las fracturas, sólo tenía que esperar a que el hueso quedara perfectamente sellado, pero ahorita ya no soporto la sonda que traigo en la nariz y no me la pueden quitar porque mi estómago tiene que estar totalmente limpio. Además, vivo de mi cuerpo y me da mucha tristeza que me hayan hecho una herida tan grande en el abdomen. Es frustrante saber que esto va a cambiar totalmente mi vida, mi alimentación, mis entrenamientos y mis planes en la lucha libre.»

Justo cuando le ocurrió esta desgracia, Grond XXX estaba a punto de regresar a la televisión: «No les diré con qué empresa, pero era una de las dos más grandes que hay en nuestro país. Estaba listo para volver con el contrato mejor pagado. A pesar de todo, doy gracias porque estoy vivo y puedo contar lo que me pasó. Si esto no me causa más problemas, estaré de regreso dentro de un año. Ojalá que mis admiradores no me olviden.»