Actualmente la edad en que la sangre nueva del Consejo Mundial de Lucha Libre inicia su carrera se ha reducido notablemente pues, en busca de lograr su sueño, los nuevos valores llegan hechos casi unos infantes.
A casos como la Sombra, Puma King, entre otros se uno el nombre de Diamante, un joven de apenas 17 años que llegó a la Arena México, superando todas las adversidades que se le pusieron enfrente.
«Siempre me ha gustado la lucha libre, crecí viendo lucha gracias a mi papá, que fue luchador. Vine a México sin saber exactamente qué hacer para entrar a una empresa tan importante como esta, hasta que conocí a los Ángeles de Oro y Plata, ellos me invitaron a una clase con el Satánico, pasé la prueba que me hizo y me quedé como uno de sus alumnos, desde entonces todo ha sido trabajar y entrenar, para llegar a ser una estrella de la lucha libre», dijo el encapuchado.
Diamante debutó profesionalmente a los 14 años de edad en su natal Monclova, Coahuila, y en las filas del CMLL el 17 de agosto pasado en Puebla. Con 90 kilos de peso y 1.83 metros el luchador técnico está dispuesto a todo por dejar su nombre grabado en la historia de la lucha: «Dejé todo por esto, estudios, familia, fiestas, todo, pero creo que vale la pena, tengo 5 meses en el DF y las cosas se están dando, se que soy justo como un diamante al que hay que pulir, y lo estoy haciendo, por eso le digo a la afición que me siga muy de cerca, porque Diamante será una gran estrella a nivel mundial», sentenció.
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