Bienvenidos; esta vez cumpliré una de las peticiones que me han hecho y hablaré de Los Tres Caballeros, tercia integrada por El Solitario, Aníbal y su servidor. Fue una idea del señor Francisco Flores; inicialmente Aníbal y El Solitario eran grandes rivales míos; le disputé a este último el campeonato mundial de peso semicompleto, y a Aníbal el campeonato mundial medio, sin tener éxito con ninguno de los dos, ya que me derrotaron.
En una ocasión, hice una gira por Japón, y a mi regreso, me esperaba una sorpresa muy grande. Mi idea inicial era descansar unos días porque había tenido mucho trabajo desde hacía varios meses. Casi me desmayo al verme programado en el Toreo de Cuatro Caminos, y de pareja con El Solitario; nos enfrentamos al Perro Aguayo y Canek. En esa ocasión salimos victoriosos y nos vimos más rudos que los rudos, eso fue lo que dijeron las revistas especializadas.
La siguiente semana se dio la revancha y fue igual, volvimos a ganar, pero en esa ocasión intervino Fishman y los rudos fueron descalificados. La semana siguiente vino otro duelo, y ahora eran Canek, Perro Aguayo y Fishman; el señor Flores decidió que Gran Hamada nos reforzara, pero resultó que no nos entendimos bien y los rudos nos ganaron nuevamente. Para la siguiente semana, una nueva sorpresa: nos acompañó Aníbal, y se adaptó a las mil maravillas. Ese día nació la tercia de Los Caballeros.
Después de esa victoria, vino una lucha de campeonato mundial semicompleto de la WWF contra Perro Aguayo; éste sufrió una herida grande en la cabeza y perdió por abandono porque se estaba desangrando, pero yo no quería ganar así, por lo cual no acepté el triunfo y dejé el cinturón en el centro del ring. Y es que yo estaba preparado para ganarle al Perro de manera clara y contundente. Dos semanas después se dio la revancha y allí sí me coroné campeón mundial, pero Aguayo no quedó conforme y pidió una lucha máscara contra cabellera; y le volví a ganar, así que fue de gran fortuna hacer el trío de Los Caballero porque me trajo buena suerte.
La tercia que integramos El Solitario, Aníbal y yo no duró mucho (poco más de un año), porque un día Solitario y Aníbal se pelearon y este último se volvió rudo. Aníbal era muy fino para luchar, un gran esteta de los cuadriláteros, con un estilo pulcro; Solitario era más violento, más entrón, quizá no tenía la misma estética que Aníbal pero era muy bravo y fuerte y tenía la juventud y la pujanza, así que éramos una tercia que reunía los requisitos para gustarle al público. Espero sus comentarios a www.villanotercero.com, o bien a ardimen3@yahoo.com.mx.