S in duda alguna, entre los luchadores independientes no hay nadie más espectacular que Freelance. Por sus peligrosos lances, se ha ganado el corazón de quienes asisten a la arena Naucalpan. Entre las butacas, cuando él lucha, es frecuente que los aficionados se pregunten por qué ninguna empresa grande se lo ha llevado. El gladiador comenta al respecto:
|
«La verdad, no sé. En este año tuve una prueba en la empresa Triple A, y pensé que estaba adentro, pues hasta el licenciado Joaquín Roldán me felicitó, pero a la mera hora me quedé esperando. En este momento, mi intención es ingresar al CMLL, espero lograrlo en 2009. Creo que tengo las cualidades para triunfar en cualquier lado, como lo he hecho en Naucalpan; aprovecho para agradecer a la directiva de IWRG las oportunidades que me ha dado».
Desde hace unos meses, Zumbido permitió a Freelance utilizar el mote de Mini Zumbido, pero el gladiador ha encontrado dificultadas que él mismo nos platica:
«Zumbido tuvo el gran gesto de permitirme ser su mini, cosa que agradezco con el corazón, pero desafortunadamente aquí en Naucalpan se resisten a programarme con ese nombre. Aquí me pusieron Freelance, pero la realidad es que muy pocos me identifican así, ya que para la gente de esta zona soy El Suicidita. Yo creo que si me programaran como Mini Zumbido, mi personaje tendría más impacto, ojalá me concediera ese deseo. Pero en resumidas cuentas, importa más lo que se hace en el ring que los motes. La afición sabe quién soy y cuál es el tipo de espectáculo que puedo dar».
En 5 años como carrera, sorprende saber que, no obstante su estilo aéreo, Freelance (o Suicidita, o Mini Zumbido) no ha sufrido golpes o lesiones de gravedad. Tanta es su seguridad, que levanta la voz:
«No tengo nada contra Bam Bam o Mascarita Dorada, respeto su trabajo, pero les quiero decir que el mejor luchador aéreo soy yo. Cuando quieran, se los demuestro. Precisamente me gustaría tener una oportunidad en la arena México, para ponerles la muestra a sus minis, porque varios se creen muy voladores, pero, la verdad, no están a mi nivel».